Sierra Nevada desde mi ventanilla |
Salir de un país donde mirar a los transeúntes se considera cívicamente incorrecto
para entrar en otro donde los taxistas te narran sus experiencias de juventud en el extinto servicio militar obligatorio.
Salir de un abril en torno a los cero grados centígrados
para llegar a otro en torno a los veinticinco.
Salir de una nevada
para pisar el sol.
Y, no obstante,
está más fría Córdoba que Trondheim.
Ya se sabe.