Y los últimos sueños huyen por la ventana.
V. Huidobro
Amanece
y un pájaro nocturno
cruza veloz el cuarto
para posarse en tu frente y anidar
como frágil estátua entre tus ojos.
Lenguaje diminuto, incomprensible
voz, música pequeña de su cuerpo
diciéndote al oído:
¿de quién es ese sol
distinto y esa luna más acá del cristal,
por qué invisibles hilos danzan,
a qué estarán soñando?
Nieves Chillón
Morning Blues
Cuadernos del Vigía, 2006